Somos especialistas en Psicología Infantil y Juvenil. Problemas como la agresividad en niños y adolescentes, acoso escolar, hiperactividad o la relación entre padres e hijos son algunas de las áreas en las que podemos ayudarte.
Cuando debemos de afrontar una psicoterapia infantil, los psicólogos especialistas ayudamos principalmente a los padres a entender y ayudar a sus hijos. Es decir, como primera vía intentamos enseñar recursos y herramientas psicológicas a los padres para que sean ellos los que inicien el cambio en sus hijos. Además, en base a nuestra experiencia previa, siempre que podemos, intentamos que los niños no vengan a la consulta de psicología en Palma de Mallorca. Tampoco nos gusta etiquetar a los niños, porque hemos estudiado mucho el efecto nocivo del etiquetaje a los niños pequeños y a cualquier persona sea de la edad que sea.
Nuestros psicólogos infantiles en Palma de mallorca resuelven en muy pocas sesiones los problemas que sufren los niños. Esto lo podemos hacer porque no buscamos las causas que nos expliquen el por qué un niño tiene un trastorno o sufre, ya que hemos comprobado que hacerlo culpabiliza mucho a los preocupados padres y, además, no garantiza que de esta forma el problema se solucione. Por lo tanto, en vez de hacer un estudio de los motivos, realizamos un estudio de cómo funciona el problema, es decir, analizamos qué soluciones se han puesto en marcha que no han acabado de funcionar, las estrategias de intervención han sido fallidas para poder proponer una nueva estrategia que dote a los padres de nuevas indicaciones eficaces. En la mayoría de los casos, los niños no tienen problemas graven que requieran tratamientos psicológicos más complicados y prolongados. Lo que necesitan es más comprensión por parte de sus padres y una guía de cómo resolver ciertas condutas inadecuadas o dañinas.
Ir al psicólogo infantil en Palma de Mallorca debería ser la última opción. Porque en la mayoría de los casos, los problemas se van solucionando por su propio pie. Sin embargo, cuando los padres se sienten superados y no encuentran la solución por ellos mismos. Es momento de hacer una pequeña visita al psicólogo y recibir un par de consejos prácticos y recomendaciones. Podemos acudir a un psicólogo infantil s por ejemplo somos padres primerizos y necesitamos ayuda para saber educar y criar a sus hijos durante su desarrollo, conocer las diferentes fases evolutivas del niño y saber gestionar los conflictos, problemas de autoestima u otras problemáticas habituales. Otro motivo sería cuando una problemática se repite en el tiempo y a los padres les da la sensación de sentirse perdidos y de no controlar la situación, o bien, ninguna de las soluciones intentadas para gestionar el problema lo soluciona. Esto suele suceder en niños menores de 10 años.
Trastornos de conducta, trastornos de apego, ansiedad infantil, psicología perinatal, trastornos de la alimentación, trastornos del sueño, trastornos de regulación emocional, dificultad de aprendizaje, TDAH déficit de atención, adicción a pantallas, depresión infantil, etc. Aunque en la mayoría de los casos, vienen niños con conductas totalmente normales, pero que sorprenden a sus padres y tras saturarse de información recibida por Internet, deciden llamar urgentemente a un psicólogo infantil. Por otro lado, recomendamos, no obstante, no esperar a que el problema se haga muy grande para acudir a un psicólogo. En muchas ocasiones, es de lo más recomendable hacerlo cuando prevemos que el niño se enfrentará a una situación que puede causarle algún tipo de malestar o desestabilización, como es el caso de un divorcio o un traslado.
Los problemas infantiles por general son más sencillos de corregir porque la personalidad del niño aún no esta del todo desarrollada. Por lo tanto, aunque sea difícil, hay que mantener la calma, evaluar los motivos que afectan al niño y tratar se solucionarlos lo antes posible.
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