Muchos son los libros de autoayuda que existen para abarcar los problemas que aparecen en nuestra vida sexual. ¿Por qué no podemos quedarnos con estos libros y debemos acudir a un sexólogo?
Estos libros generalizan en todos los contextos, no tienen en cuenta a la persona ni el problema en concreto que tiene. Las soluciones o las técnicas que dan y que invitan a ejecutar en pareja o en solitario, son sólo aplicables a un tanto por ciento muy bajo de la población, ya que, las causas de la eyaculación precoz, por ejemplo, son muchas, distintas, variadas y personales y sobretodo y lo más importante, psicológicas. En estos libros encontraremos posturas graciosas, divertidas, originales, soluciones curiosas, ideas para una noche de amor desenfrenado... pero jamás podremos encontrar una solución exclusiva y adecuada a nuestro problema.
El acudir a un sexólogo significa ponerse en manos de un profesional que evalúa nuestro problema como único y personal.
Problemas de eyaculación precoz, que en muchas ocasiones no son tales, problemas de anorgasmia, problemas de pareja, problemas de falta de deseo sexual, dolor en la penetración, sensación de mareo mientras se realiza el coito, problemas en la masturbación, deseo sexual generalizado...
Muchos son los motivos de consulta, todos ellos importantes y exclusivos, a los que un sexólogo dará respuestas, únicas y cualificadas para cada caso en particular.